Synopsis
Este libro tiene como objetivo analizar de qué modo se entreveran en la sociedad actual dos caras de la vulnerabilidad, la social y la existencial. La investigación se centra en tres colectivos en los que el nuevo rostro de la vulnerabilidad de perfil socioexistencial tiene unos rasgos más definidos: jóvenes, personas desempleadas mayores de 45 años y cuidadoras de la red familiar. Para ello se indaga en sus condiciones de existencia, prácticas y representaciones.
Uno de los focos principales de atención son los soportes, no solo económicos e institucionales, sino también los de contenido socioexistencial, de suma relevancia cuando aquellos se fragilizan. Soportes, materiales y simbólicos, que actúan de modos diferentes, con mayor o menor visibilidad, conciencia y legitimidad; y que nos revelan el trabajo que hacen los individuos sobre sí mismos para “sostenerse”, “soportar” su situación, dotarla de sentido o transformarla. Soportes siempre sociales, condición de posibilidad del individuo, en una visión que ataca frontalmente el mito del self-made man.
Esta investigación realizada en equipo nos enfrenta a un problema social con una mirada sociológica renovada que se adelanta a cuestiones de creciente interés para esta disciplina, como los cuidados, las agencias desde la vulnerabilidad, las emociones o la resiliencia.