EL MENSAJE

Real se volvió el silencio en un mundo con voces a la deriva, con odio en el corazón, con rabia por desilusión y miedo a montón. Ya nada es igual desde que el mensaje fue recibido satisfactoriamente. Por uno pagarán muchos, pero no es la esperanza una ilusión muerta, sino el horizonte mirando el pensamiento del alma. Podrán engañar al mundo entero con la fuerza del débil, y por la sabidu-ría del cobarde se vestirán los malditos de arrogancia, mas la ignorancia del justo no es oculta por el valor del pasado, ese mismo se hace fuerte en el presente vivo con el cielo de testigo.